Un ratio financiero es la comparación a través de un cociente entre dos magnitudes del balance que guardan una relación. El resultado de este cociente nos permite conocer el estado de liquidez, solvencia y endeudamiento de la empresa.
El concepto de ratio y sobre todo su significado puede resultar difícil de abordar si nunca se ha trabajado con ellos, por lo que partiremos de un breve ejemplo a modo de introducción para que podamos comprender su funcionamiento al completo.
EJEMPLO
Tres amigos, cada uno con un sueldo de 2.000 € netos mensuales, deciden ahorrar durante un año para comprarse la misma moto que tiene un valor de 3.000 €. A través del estudio de ratios, indica la situación de cada uno de estos tres amigos al final del año relacionando la cantidad ahorrada y el gasto a afrontar.
Pablo se ha administrado perfectamente y sus ahorros alcanzan exactamente para comprar la moto.
El ratio obtenido es igual a “1”, decimos que es el óptimo ya que consigue justo lo que se buscaba.
Víctor no podrá comprar la moto por falta de ahorros, se encontraba muy endeudado y no lo logró.
En este caso, un ratio inferior al óptimo (1) nos indica un problema de escasez de liquidez.
José si podrá comprar la moto ya que ha ahorrado de sobra, pero se ha privado de todos sus caprichos.
En este caso, un ratio muy superior al óptimo nos indica un problema de exceso de liquidez.
Para poder interpretar el resultado de un ratio hará falta conocer su valor óptimo.
En nuestro ejemplo, hemos estudiado la liquidez de que disponen tres amigos en un momento determinado. Sin embargo, el estudio de ratios nos permitirá también conocer el estado de solvencia y nivel de endeudamiento de la empresa.
Para conocer los distintos ratios financieros que utilizan las empresas, así como sus valores óptimos, tendrás que dirigirte hacia la siguiente entrada de blog.
